Era una predicción inminente, el pueblo habló y dio el voto de castigo a los que sustentando inconstitucionalidad, limitaron a un candidato que simplemente buscaba la oportunidad de ser nominado como aspirante a la presidencia de la república por parte de su partido.
Celebro con júbilo cívico, la democracia electoral que se ha dado lugar en estas elecciones internas de los partidos políticos de fuerza histórica en nuestro país, que dejaron como resultado, a los fuertes aspirantes que competirán por la presea del poder ejecutivo en el próximo gobierno.
Me considero apolítico, entiéndase sin pasiones políticas, sin ambiciones al erario público , pero eso no apaga mi sentido de la dignidad nacional y la justicia.
Las estrategias políticas que se gestaron para, como una trampa mal intencionada , mas que provocar la dimisión de el candidato en mención, lograron incitar al pueblo quien aborrece esos actos de corrupción disfrazados de verborrea política y por medio del sufragio, dejaron escuchar su voz.
El pueblo ya expresó la ultima palabra, tenemos nuevos personajes para la contienda política del 2009, ha sido un nuevo triunfo en nuestro proceso hacia la transparencia internacional.
Por eso, y tal como la frase en latín reza, los políticos deben aprender que: "Vox Populi, Vox Dei", "La voz del pueblo es la voz de Dios".
Un abrazo
