martes, 23 de abril de 2019

Un poco de locura


A veces es dificil que las personas comprendan el porqué de que existan seres que nos gusta escribir, quizás por desahogo, por vía de expresión, por contrariar a la soledad o simplemente porque nacimos leyendo libros y de todas esas historias, nos nació la sensibilidad de tomar un papel y darle a la creatividad un destino.
No todos tienen la misma imaginación, probablemente para algunos sea ilógico, ridículo o no tenga sentido darle libertad a los pensamientos y crear algo, quizás narrando entre lo real y lo utópico, o simplemente dejando una opinión.

Vivimos en un mundo donde algunas cosas se ven raras o no se entienden , probablemente porque no es una costumbre de todos, pero para el que las practica, no importa el ámbito, es natural y se siente a gusto, tal vez sea algo que ha venido haciendo por mucho tiempo, diferente a alguien que no lo acostumbra y no puede entender de donde nace el origen de esa vivencia.


Escribir es mágico cuando se usa para abrir el corazón, también una aventura cuando preso de un arranque nace una historia que capta la atención o nos dibuja una sonrisa de la nada, en dias donde se nos olvida sonreir.
Quizás sea que tengo una locura discreta que celebra cuando va dándole vida a una idea, a un relato ameno, a una opinión, o a una vivencia, realmente no lo sé, la única certeza es que cuando estoy frente al computador y a ésta hoja en blanco, comienza una pequeña complicidad que termina hasta que el punto final aparece y te dice: -Espero que vuelvas.

viernes, 19 de abril de 2019

Pasiones compartidas


Esa primera nos miramos con ansiedad, con delirio, con sed de sentir y desbordar en pasiones.
Nuestras bocas ya se habían conocido días atrás, como preludios de ganas que despiertas, buscaban el momento perfecto para volverse caricias y sudor.
Estábamos ahí cerca y a solas por fin, podía percibir en ella la intensidad de sus latidos, ese sonrojo en sus mejillas que era la evidente muestra que el deseo también era un antojo que ella ya no disimulaba.

Todo lo inició un beso, breve al principio pero que a medida los labios se acoplaban, se volvía hambriento, ansioso de cambiar de destino, quizás bajo la influencia de su perfume que combinado en su piel era un excitante estímulo que lo gobernaba todo.
Hasta ese momento su cuerpo desnudo había sido algo con lo que mi imaginación jugaba pero en ese instante, dejó de serlo, admitía que la realidad suele ser mejor que la fantasía cuando se materializa y se disfruta un sueño que se consigue. Así fue esa vez, cuando la cordura se escapó por la ventaja y el delirio y el descontrol volvió cómplices a dos cuerpos que se disfrutaban sin reservas ni tabúes.

Y es que no hay instante donde seamos más libres que ahí donde las ropas caen y el deseo hace una fiesta en la piel, donde los labios navegan curiosos por una geografia de mujer que entre gemidos, canta una canción al placer del que es presa en ese instante, hasta que explota en su vientre y la hace vibrar hasta quedar en calma, sonriendo.Luego, y si se vuelve inolvidable, nacen vínculos, necesidades, afectos, historias nuevas,impredecibles, como si a veces por la piel se llega a acariciar el corazón, y sucede sin duda, más de alguna vez.
Evidente que la piel conserva la memoria de todas esas pasiones, pero que fortuna si al final, el corazón y la piel se quedan a perdurar en alguien y hacen de esa experiencia un hogar, una compañía donde la soledad es solo un mal recuerdo.

Y si pasa que bien y sino, lo seguimos intentando.


miércoles, 3 de abril de 2019

Rutina


A veces nos autoprogramamos rutinas que con el tiempo nos van ahogando y cuando atentamos contra ellas, saliendo de nuestra zona de confort, la vida es un festejo auténtico a pesar del riesgo que conlleva.
Es que el tiempo pasa y repentinamente te descubrís ante un horario rutinario del que te quejas pero no haces nada por cambiarle destino, o probablemente, no hay eventos que lo hagan posible.
¿Siempre fue así? Seguramente no, indudablemente hay circunstancias que nos marcan y nos desprograman los hábitos en rutinas que no siempre son la visión exacta de lo que quisiéramos, pero mientras cambiamos eso, la mente se extravía soñando un poco en todo eso que quisieras vivir para dedicarle el tiempo que merece y mientras le das vacaciones a la rutina, la felicidad se pone cómoda y te dedica unas horas.

Ojalá pronto...



martes, 19 de marzo de 2019

Una vivencia agradable

Callada y discreta, mantiene la mirada fija en su celular mientras degusta sin prisa su almuerzo, siempre escoge de esos que son saludables,  no como los de cavernícolas que yo suelo consumir amante de la carne y los excesos. A veces la suerte o la casualidad permiten coincidir en una conversación compartida, breve casi siempre pero llena de carcajadas, cúlpome por lo ocurrente a veces de los temas que salen a relucir mientras todavía no se ha roto la tertulia y llega repentina la despedida y se quedan de herencia el buen momento.
Ella no desperdicia sonrisas, ríe cuando quiere, discreta y callada a la vez, un agradable misterio, será por eso que es grato cuando el reloj coincide y la vuelvo a encontrar, entonces vuelvo a propiciar un tema incoherente y divertido que sirve de excusa para verla sonreír otra vez.


Así es ella...

miércoles, 13 de marzo de 2019

El paso del tiempo

Ya hace muchos años no le doy continuidad a este desahogo de escribir, veo hacia atrás y hay tantos cambios, tantas enseñanzas y cicatrices, vivir tiende a ser una sucesión de eventos inesperados basados en nuestras decisiones que ojalá fueran acertadas siempre, pero bueno dicen que sino la vida sería insípida y hay que equivocarse de vez en cuando, tocar fondo alguna vez, los años no pasan en balde dicen y dejan algo que aprender y descubrir de nosotros mismos.
Realmente pensé Google había aniquilado mi blog por el tiempo que llevaba de no usarlo, es una fortuna de pronto hoy la casualidad me mandara un mensaje a mi correo y me diera esta segunda oportunidad de darle rienda suelta a las palabras, al sentir, a lo que se me venga en gana cuando de escribir se trata, quizás en una anécdota trivial o compartiendo algun poema, algun criterio, algo que forme parte de mi y se escurra por este lienzo gratuito.

Mientras se me ocurre darle sentido a las palabras y me recupero de una infección bacteriana que me regala fiebres cada seis horas, es bueno estar de vuelta en este espacio, escribir y sentir, volvemos a encontrarnos.

Hasta la próxima...